jueves, 13 de enero de 2005

El Quijote

Hola de nuevo.
Pues que una de las aficiones que he adquirido también estas navidades, por lo de los anuncios de antes, pues fue ir leyendo El Quijote de nuevo, con eso del IV centenario (ya que para el V creo que no voy a estar por aquí) entre anuncio y anuncio. Y la verdad es que se puede leer a lo tonto bastante, así que os animo a hacer la prueba.
A parte de la versión de toda la vida en papel, está la pdf, que os la podéis descargar en http://www.donquijotedelamancha2005.com/descarga.php
Pues nada, a disfrutar.

Ah!!, por cierto, para los muy vagos, o para los que no les quede más remedio, pues he visto una página que te va leyendo los capítulos http://www.cervantesvirtual.com/FichaObra.html?portal=40&Ref=1270&audio=1 , aunque en algunos Adobe Readers (versión 6) y con Windows 2000 como mínimo, tenemos la opción de leer documentos.

miércoles, 12 de enero de 2005

sobre anuncios en las vacaciones de navidad

Estas Navidades "aproveché" para ver la tele, entre gripe y gripe.
Al principio de las vacaciones, como que me sentía incómodo porque creí que olía mal, que no comía lo suficiente o que mi coche no era lo suficiente moderno; amén de ser poco solidario por no estar mandando mensajes cortos solidarios con mi móvil completamente desfasado y de no viajar a paraisos idílicos. Como en mitad de las vacaciones, definitivamente, creo que olía mal, que no practicaba suficiente deporte, aunque sea a -5º para empeorar mi gripe, que no bebía suficiente alcohol, y seguía sin comer suficiente. También me di cuenta que mi reloj ya no estaba de moda y que a mis familiares pequeños tenían igualmente juguetes poco sofisticados. Al final de las vacaciones, pues que el mundo está de rebajas, que hay unos chollos de impresión, que siempre estoy a tiempo de dejar de fumar, que se puede coleccionar cualquier cosa, que a ver si me releo el Quijote, que las chicas deben de ir a una clínica para ponerse en línea, que hay una nueva generación de alimentos que desde el desayuno te ayudan a perder los excesos cometidos. Menos mal que ya olía mejor!!!

Pues eso, que si esto es lo que transmiten los anuncios de televisión, pues que casi mejor no verla, vamos digo yo.